Estamos en calentamiento global, en crisis climática, en desabastecimiento de embalses, con fuentes hídricas con bajos niveles y contaminadas, con cortes de agua en pueblos y ciudades. En el mundo y particularmente en Colombia, país que es considerado potencia mundial hídrica por contar con mas de 48000 humedales, numerosos ríos, nevados, lagos, lagunas, ciénagas, dos mares, cuya mayor riqueza hídrica se encuentra en las regiones de la Orinoquía, Amazonía y pacífica la preocupación de la “ausencia” del agua potable es significativa.
Por fortuna para Colombia el Presidente Petro pone en el orden del día el tema del agua frente a otros gastos suntuosos que si bien es cierto se deben resolver no son vitales (de vida). Los planes de desarrollo Municipales, Distritales como lo tiene el Plan de Desarrollo Nacional con sus proyectos y programas deben estar en dirección a la adaptación al cambio climático y el ciclo del agua tanto para lo urbano como para lo rural deben ser atendidos con medidas eficientes y sostenibles. Es inadmisible que hoy muchos municipios de Colombia no tengan planes maestros de acueducto y alcantarillado y en consecuencia no tengan políticas públicas de agua potable con todas las consecuencias contra la salud de los seres vivos.
Se llega entonces a lo previsible, cortes de agua por sectores, por horarios establecidos tal como lo ha determinado para el caso el Alcalde de Bogotá Carlos Fernando Galán mas recomendaciones del común y que deben ser cotidianas y permanentes y no por atender una coyuntura que se está tornando crítica: poca agua para el lavado de dientes, baldes en ducha para recoger agua fría antes que caiga agua caliente y otras. Pero además de lo anterior el mensaje a dejar claro desde el gobierno incluyéndose hacia la ciudadanía es que no hemos tenido el suficiente respeto por la naturaleza, por las fuentes hídricas, por los paramos etc.
Entonces manos a la obra, autoridades municipales, distritales, concejos y asambleas, estamos en un buen momento para corregir y enviar mensajes de política pública de defensa del agua y se hará a través de la construcción de planes de desarrollo cuyo eje articulador para la ordenación del territorio sea la gobernanza alrededor del agua para estar en correspondendencia con el Plan de Desarrollo del gobierno nacional. Tal como está establecido en las ideas claves en la parte general del plan, “El respeto por el agua, sus ciclos y los ecosistemas, nos llevará a que Colombia sea un territorio mejor adaptado a los cambios del clima, con la provisión de servicios necesarios para el bienestar de la población y de una economía próspera”.
Que se hace necesario incluir otros temas de importancia en los planes de desarrollo es cierto, pero para hoy y el futuro la principal inversión está en la protección del agua. Seguramente otras necesidades pueden esperar, el AGUA es vital, es vida.